Lo hace en los más diversos escenarios y actividades musicales desde Ginebra, Suiza, donde vive desde 1976, Eduardo Kohan. Ha nacido en Avellaneda, Provincia de Buenos Aires, Argentina y con su saxo se expresa en múltiples facetas. Vamos a la ciudad suiza para que nos cuente…
Eduardo, lo primero… ¿De dónde eres en Argentina? Cómo fuiste llegando al mundo de la música… o era algo que venía como equipo original de fábrica?
Viví en Avellaneda, mi mamá tocaba un poco el piano y mi papá rascaba un violín… estudié el piano en el Conservatorio Williams de Avellaneda donde los profesores, aliados a mis padres, llegaron casi a hacerme odiar la música. Por suerte a eso de los veinte años, gracias a unos amigos, descubrí el jazz, la improvisación y a Coltrane¡
Y en ese devenir… de pronto un saxo…
Parker, Coltrane, Getz…
Gran parte de tu carrera la estás haciendo en Europa… ¿Qué podemos reseñar de aquellos años 70 en Argentina, antes de emigrar?
Estudié el saxofón, toqué y grabé en 1973 un disco con La Banda del Paraíso. CD re-editado en 2011 por RCA Records Label.
Me acompañas horas completas a través del CD Tango Nómade que has grabado junto a Juan María Solare, otro argentino, músico y genio instalado en Bremen, Alemania… pero tú, que haces tango, realizas muchas más cosas…
Practico cualquier género musical donde se me permita improvisar y ser el que soy… No soporto estar enjaulado ni ser solamente la correa de transmisión del compositor…
Y todo esto en escenarios, discos… ¿O con tus composiciones llegas a otros ámbitos, medios de comunicación…?
Sinceramente no lo sé…cada vez que uno toca o graba es como lanzar botellas al mar (sin olvidarse de poner el mensaje por supuesto)…vaya uno a saber a donde van a parar…
Yo te conozco más por tus producciones tangueras ¿Qué ocurre cuando no tocas tango?
Todo lo que toco suena tango…Hace unos años fui a Brasil para tocar esa música increíble (pariente del tango) que es el choro… Toqué con músicos buenísimos (por ejemplo Altamiro Carrilho) y todos me decían lo mismo: tocás fenómeno pero suena tango y no choro…Me he resignado, toque lo que toque sonará tango…por la simple razón que a pesar de todas las definiciones y explicaciones que pueden darse, el tango es, como dice Horacio Ferrer, un “estado de ánimo” propio de del área cultural rioplatense…
Fuiste uno de los artistas argentinos que participaron en un día muy especial nuestro en Ginebra, con Jorge Luis Borges como epicentro…
Tuve el honor de tocar en la ceremonia de inauguración de la calle Borges en Ginebra. Pero mi placer máximo es leerlo… La lectura es otra de mis actividades esenciales…alguien una vez me hizo un artículo y lo tituló: El saxofonista que devoraba libros.
Desde hace 5 años escribo artículos sobre la improvisación en una revista ginebrina (voy por el número 65) y al final de cada artículo recomiendo un libro…
Hecho todo esto y mucho más, con giras europeas y por Argentina y Uruguay, también Eduardo Kohan está abocado a la enseñanza del saxo y la improvisación… una actividad más, Eduardo, confirmando aquello que el que más hace, más haría…
Me gusta enseñar porque es la mejor manera de aprender. Lo que más me gusta en la vida es estudiar…felizmente siempre hay cosas que aprender… y ser ignorante, en mi caso, es una suerte…
Proyectos, sueños, futuros caminos…
Cada día es una aventura…desde hace unos meses me puse a plasmar en papel mis delirios musicales…me divierte mucho, escribo casi todos los días y lo mejor es cuando la partitura está terminada…entonces toco, le cambio notas, invento, improviso…juego como un chico!
Tengo un nuevo dúo con una cornista, Monika Esmerode, y me encanta escribir historias musicales para corno y tenor.
Mi dúo con el pianista ginebrino Jean Ferrarini (tocamos juntos desde hace 17 años) es mi actividad musical principal. En marzo haremos algunas experiencias en cuarteto, agregando bajo y batería.
Actualmente mi actividad puramente (si existiera lo puro) tanguera es un dúo con el guitarrista argentino Narciso Saúl. En junio lo transformaremos en trío con el contrabajista argentino Eduardo Alegre.
En 1981 grabé en el sello suizo Hat-Hut un disco en trío con Alicia Jara e Igor Francesco que se llamaba El Circo del Arca (inspirado en el libro Mascaró, el cazador americano de Haroldo Conti). He redescubierto esa música últimamente y estoy haciendo videos con ella.
Seguramente volveremos a Ginebra para que nos cuentes más cosas en un tiempo… por ahora, muchas gracias por tu tiempo…
Te digo hasta pronto con estas palabras que escribí hace unos años…
Improvisar
No hay mejor escuela, podría decirse que no hay otra, para aprender a improvisar que la música llamada jazz. ¿Qué quiere decir improvisar? Una definición de diccionario diría que es hacer algo de pronto, sin preparación previa. Por ejemplo improvisar una cena…En la música que yo practico, esta definición es incorrecta, o incompleta. Improvisar es inventar, imaginar, crear en el instante sobre bases dadas, y para que el discurso, o la historia sonora sea coherente, fluida, expresiva, emotiva, es necesario un trabajo previo inmenso, enorme, gigantesco…La improvisación es un lenguaje…Se necesitan años de práctica para poder expresarse libremente, sin esfuerzo… Toda una vida…
Cuando hablo de práctica me refiero a la parte técnica descripta en innumerables libros: escalas, arpegios, cadencias… Y luego está la parte no cuantificable, abstracta, imposible a enseñar ni a aprender y que depende de cada individuo. Improvisamos como somos, como vivimos…Y a ser, vivir, existir, no se aprende en los libros…
Yo no puedo tocar si no puedo improvisar, me siento encerrado, enjaulado…no puedo caminar con los zapatos del compositor, me duelen los pies y la alegría se me evapora…Toque lo que toque, en el momento que lo hago el compositor soy yo…
Cuando yo hago música, mi objetivo no es convencer ni deslumbrar (me tiene sin cuidado ser original, vanguardista o lo que sea), lo que busco es un sonido orgánico, sensaciones, percepciones, emociones. Un cierto estado de felicidad en el cuerpo. Sentimiento de no ser, deleite de los sentidos… Conmover, sobre todo a mí mismo…
Ahora dejaremos que nos conmuevas a todos cuando realizas Infamia de Enrique Santos Discépolo
ENTREVISTA DE EDUARDO ALDISER – MADRID 2010