«Me llamo María Flavia Catella. Nací una mañana de diciembre de 1968 en la Ciudad de Santa Fe, Argentina Soy la segunda hija de una familia de cómoda clase media en la República Argentina que en ese entonces tutelaban arbitrariamente las dictaduras militares…Después de mí nacieron las trillizas, sólo cuatro años después, lo que me convirtió en una pequeña bastante invisible: era el segundo de tres nacimientos muy cercanos entre sí.
No era la hija mayor, la que había acaparado las primeras ansiedades de mis padres y los primeros abrazos… esa primogénita que cumple con el sueño paterno inicial de formar una familia; tampoco era una de las trillizas, tres hermosas niñas rubias que llamaron inexorablemente la atención de todos por su simpática naturalidad genética desde los primeros momentos de conocerse su existencia en el útero de mi madre. Era solo una niña común, de pelo moreno y ojos rasgados, retraída y silenciosa, nacida en la mitad de una sucesión de hermanas y creciendo bajo la ingrata sombra de esa suerte ordinal.
Sin embargo, no tardé en encontrar el amparo en poesías que escribía desde los siete años de edad y guardaba entre los papeles de la escuela, poesías que unos años más tarde se convertirían en un arma secreta que concentraría compañeras y amigos a mi alrededor en la complicidad de aquellas letras…”
María Flavia Catella alumbró su primer libro en Málaga, España – Entre dos lunas
Así comienza “Entre dos lunas”, mi primer libro, publicado en Málaga, España, por Editorial Vértice y nacido después de haber vivido bajo circunstancias especiales y de haber recordado cada pensamiento, cada actitud y cada decisión tomada que hoy hacen eco en una vida que se desenvuelve entre rostros nuevos y queridos, pero a más de diez mil kilómetros de la tierra que me vio nacer y de las familias y amigos de aquellos primeros abrazos.
Peripecias vitales de una emigrante argentina
Vivo en Málaga con mi marido Raúl y nuestro hijo Agustín. Viajamos a España hace casi doce años, bajo un diluvio que no hacía otra cosa que darle más expectativas al cambio que comenzaba a producirse; terminaba el año 2000 y la vida en Santa Fe, tanto económica como socialmente, nos resultaba cada vez más difícil y nos creímos en la obligación personal de buscar un futuro nuevo para nuestro hijo, que nos brinde seguridad y una modesta tranquilidad económica como lo que hoy hemos conseguido.
Luego de unos años viviendo, tantos cambios y tomando muchas decisiones, llevando nuestras pertenencias más queridas y nuestras ilusiones a cuestas por las calles de Málaga, nos establecimos en la tranquilidad de un trabajo próspero en El Corte Inglés y un estudio académico adecuado para nuestro hijo. En esta hermosa ciudad nos hemos desarrollado, arropados por el calor de una sociedad que nos ha recibido con una diferencia que hoy significa un crecimiento muy positivo en nosotros y disfrutamos de sus ofrecimientos naturales como un premio a nuestra osadía.
Un libro plantado en Málaga
Es entonces cuando, y a raíz de la insistencia de un pequeño círculo de lectores amigos, férreos seguidores de mis letras a quienes agradezco especialmente el hecho de que “Entre dos lunas” haya visto la luz, y de mi marido y de nuestro hijo, persistentes en su afán de que me aferrara a mi vocación, comienzo a desvelar “nuestras intimidades” como un ejercicio personal de comprensión de todo lo que habíamos vivido y de la magnitud de las consecuencias y sacrificios acarreados, que se fue convirtiendo con el transcurso de los capítulos en la necesidad de compartir un arriesgado sueño empeñado en salir adelante, a pesar de los riesgos y en favor de las ilusiones.
Así nace “Entre dos lunas”, una autobiografía en la que plasmo mi vida, desde pequeña, dividida en dos partes: sus dos lunas. La primera se desarrolla bajo la luna de mi ciudad natal, Santa Fe, en Argentina, junto a su río, sus tiendas, sus grandes casas con jardines y la tranquilidad de sus calles llenas de gorriones y paraísos en flor, rodeados de las personas maravillosas que nos asistieron cada día durante más de treinta años.
Y la segunda parte, bajo mi otra luna, en las hermosas esquinas de Málaga, ciudad que describo y comparto en las páginas con mi más sincera devoción y agradecimiento, relatando paso a paso cómo llegamos, mi marido, nuestro hijo y yo, a tomar la decisión de dejar tantas querencias a tantos miles de kilómetros y enfrentarnos a una nueva vida, rodeados de gente que no conocíamos, de oportunidades que ni siquiera sabíamos si íbamos a encontrar y de muchos recuerdos.
Entre dos lunas es la historia de alguien decidido a cambiar su suerte a costa de muchos sacrificios, muchas decisiones tomadas a tiempo, llantos e ilusiones, que apostó por un cambio, a pesar de los riesgos que corría y de las consecuencias que podrían surgir de esa decisión, dejándose llevar por el deseo innato de superarse en la vida y de cumplir sus sueños. Así digo en el libro…
“Mi historia es la que quería contar porque me llena la vida saber que todo ha salido bien, que ahora sí está escrito y que nos ha valido un crecimiento muy especial, porque tenemos un hermoso hijo que madura con lo mejor de nosotros y de lo que ha sabido aprender en sus jóvenes años, dos rostros llenos de huellas de lágrimas y de sonrisas vividas juntos y después de andar tantos años entre dos lunas diferentes hemos podido formar un hogar maravilloso en Málaga repleto de balcones y geranios en flor.”
Mi intención es llegar a todos los rincones posibles con el mensaje del libro: que los sueños, si nos empeñamos y los buscamos con amor, mucha obstinación y trabajo, pueden cumplirse.
Y vos… ¿Hasta dónde dejarías que te lleve un sueño?
María Flavia Catella Málaga, España
Autora del libro “Entre dos lunas”
EDICIÓN DE EDUARDO ALDISER – MADRID 2011
