Conocí a la Malena del Tango – Roberto Palmer

 

 

 

Roberto Palmer, durante más de treinta años una de las voces del conjunto folklórico argentino Los Cantores de Quilla Huasi. Vivió con su mujer Elsa en el departamento que Elena Tortolero (que no Torterolo como he leído en algún libro) tenía en Maipú 746, planta baja – A – Buenos Aires – Argentina

 

 

 

 

Roberto Palmer y la Malena del Tango en Buenos Aires

La que fuera cantante e inspiradora para la gran mayoría, del tango Malena, viuda ya de Genaro Salinas y con dos hijos , Concepción y Genarito, se vio obligada a alquilar parte de su casa para poder sobrevivir. Palmer estaba entonces con el Trío Azul y Elena (Roberto cree recordar que su nombre completo era María Elena) era su representante. En algún momento quedó libre esa habitación y el cantante se trasladó con su esposa, casados poco tiempo antes, a la vivienda de la calle Maipú.


Cuándo fue Malena la Sra. Tortolero

Su padre era diplomático argentino. La Tortolero adoptó el nombre de Malena en los años que, junto a su marido, vivieron en Brasil, donde la conoció Homero Manzi, cantando ella tangos. De esos encuentros surgió la inspiración que plasmó en la letra que conocemos. Como Homero estuvo también un cierto tiempo en Brasil, la mandó a Lucio Demare. Éste recibió el sobre de mano de un amigo en común, lo guardó en su chaqueta. Justo el tiempo estaba cambiando, ésta quedó colgada en su ropero. Pasado unos meses Manzi le escribió preguntando si le parecía buena la letra. Fue cuando recordó ese sobre olvidado. Lo demás esta sabido. Juntos parieron un gran tango, Malena. Claudio Manzi, nieto del poeta, brinda una interpretación sobre esta creación     en la serie sobre su abuelo realizado en la Península del Morrazo de Pontevedra, España.


Cuando Roberto Palmer comenzó a levantar el vuelo

Para remontarnos a aquellos días en Buenos Aires, nos situamos a fines de la década de los cincuenta del pasado siglo. Recuerda Roberto que en el año 1959 cantaba como solista en la sala Le Mans de Buenos Aires, propiedad del locutor Jorge Ruanova, donde la principal atracción era el pianista Lucio Demare, autor de la música de Malena. Este le confirmó que Elena Tortolero era la mujer que inspiró al autor de la letra, Homero Manzi. Cuando Palmer le contó a Elena que Demare actuaba en ese lugar, le pidió que la llevase para saludar al maestro. El encuentro fue muy emocionante. Seguramente algún fotógrafo habrá inmortalizado ese momento.


María Elena Tortolero, telón final en Montevideo

Elena Tortolero murió en Montevideo, Uruguay. Fue Elsa, la mujer de Roberto, quien acompañó a su hijo Genarito; se trasladaron al vecino país para repatriar los restos de la cantante y depositarlo junto a los de su marido, en el Panteón de los Artistas en el cementerio de La Chacarita de Buenos Aires. Recuerda Palmer que en aquél momento se encontraba actuando en Chile.


Palmer tiene un tema, Las manos de Malena

En una oportunidad le contó esta historia al poeta Néstor Cesar Miguens en Córdoba, Argentina. “Algo que lo impresionó fue cuando le comenté la gracia que tenía Malena en las manos”. Y de ese encuentro nació un tema precioso que se llama Las manos de Malena. Néstor Cesar Miguens escribió el poema y Roberto Palmer le puso música ¿Lo recordamos?

Las manos de Malena

Yo te evoco en un tiempo de farol en la esquina
un tiempo que juntaba corralón y almacén
y el barrio compadreaba con perfume a glicinas
y encendía el otoño su luna a querosén.

Después tu adolescencia, por tu alegre morena
el samba alucinante y el tango seguidor
la vieja Buenos Aires del patio de la escuela
y aquél Brasil ardiente de tabaco y alcohol.

Malena,
Yo me aprendí tu historia en tus manos que hablaban
en tus manos nacidas, para entibiar amor
tus manos que reían, tus manos que lloraban
con un mensaje blanco de paloma y de flor

Yo aprendí de tus manos, que la vida lastíma
tus manos que cantaban más hondo que tu voz
y aprendí que los sueños, duelen como una espina
cuando agitaste el blanco pañuelo del adiós.

TEXTO DE EDUARDO ALDISER – MADRID 2011