Alberto Bono, había nacido en Rosario cuando despuntaba el año 1943 y allí estaba en el momento del adiós, el 20 de Octubre 2010. Daremos alguna pincelada sobre el artista plástico y pondremos el acento en el bandoneonista, que en sus comienzos fue actor y modelo. El Flaco Bono, como todos lo llamaban, podía ser y hacer lo que quisiera, tenía el don del arte en su sangre.
Su itinerario lo fue llevando a lugares muy diversos del mundo y en la película Mariposas de colores filmada en Rosario, Argentina, podemos verlo auto interpretándose y mostrando su manera tan particular que tuvo de ver la vida. Ora estaba dándole pinceladas a un cuadro o a un gran mural, como sentía la necesidad de abrazar el bandoneón y sacarle notas sentidas, doloridas, profundas. Cuando hacía tango en un escenacio alcanzaba un climax creativo que llegaba hasta el público.
Alberto Bono en Galicia
Nos conocimos cuando en 2003 en Madrid. Lo contrataron para realizar una serie de láminas para el calendario de una importante empresa de La Coruña. Siempre Alberto Bono se ha sentido en su casa allí donde estaba. Lo mismo le ocurrió en Galicia, donde fue reclamado por distintas instituciones y centros culturales para realizar conciertos de tango, muchas veces con la exhibición simultánea de sus obras pictóricas. Llevaba desde 1994 con su atelier en La Coruña, España, y es en esta ciudad donde convive con pintores de la talla del inglés Tim Behrens (quien fuera compañero de Lucien Freud y Francis Bacon), Alfonso Abelenda, Santiago Caneda, Laureano Vidal, Carpo, Bustos, Bueno y otros.
El día que lo dejó «colgado» a Mario Corradini en Ancona
Alberto Bono: “Cuando en el 97 mi hijo hizo un CD fuimos a España y me quede 6 meses allá. Me olvide de algo muy importante que me había hablado Mario Corradini, autor muy conocido, para hacer con él una gala en Ancona, en la costa del Adriático italiano. Llegó el día y yo en España. Con tanto pintar y tocar el bandoneón, me había olvidado. Me llama mi sobrino que vivía cerca de Mario y me cuenta ya no había tiempo para llegar. Me salvó un flautista que estaba de paso. A todo esto, Ancona empapelada con mis afiches y yo en España. Después de esto ¿qué pasó? Hablo con Mario y me dijo: “Flaco vos sabés como me gusta tu música, el tango que hacés. Yo te perdono, siempre y cuando vengas a Italia y grabes con mis músicos y yo el Tangonauta dedicado a Piazzolla”. Fue un gran disco. En el estreno estuvo Laura Escalado. Fue fantástico. Grabe el tema y lo puse en mi película Cuando habla el corazón. Me dejó hacer lo que yo quería siempre con el fondo de su música»
Alberto Bono, el flaco con pincel en ristre
Sus estudios pictoricos comienzan de la mano del maestro Luchina en el Teatro Nacional de Buenos Aires. Allí realiza sus primeras carteleras y fileteados, estilo que desarrollará durante una etapa de su vida. Tras varios años de bohemia en la capital argentina, regresa a su ciudad natal donde continúa con sus oficios.
En 1983 el pintor Héctor Pozzi lo invita a viajar a Buenos Aires nuevamente para pintar los paisajes portuarios del famoso barrio porteño de La Boca. Su obra paisajística se expone en diversas ciudades del país, como Córdoba, Buenos Aires, Bariloche, Rosario, Resistencia, Mendoza, Santa Fe y Santo Tomé. Y está en pinacotecas de muchas ciudades de Europa, Estados Unidos, Japón y los países iberoamericanos.
Alberto Bono y sus obras de temática religiosa
Realiza obras inspiradas en motivos religiosos para el Obispado de Rosario, actualmente expuestas en el Seminario San Carlos Borromeo. El Cristo de San Juan, de nueve metros de altura, lució como telón de fondo en el Monumento Nacional a la Bandera cuando se celebró la asunción del monseñor Eduardo Mirás como obispo de Rosario.
Alberto Bono, viajero con tango y arte
Afincado en La Coruña, en 1999 viaja a Argentina invitado por la Municipalidad de Rosario y en el año 2000 expone en el Centro Cultural Bernardino Rivadabia y en la V Cumbre Mundial del Tango realizada en dicha ciudad. En esta ocasión, además, integra el elenco de figuras de este arte como ejecutante de bandoneón. En este mismo año, auspiciado por la UNESCO expone sus obras en el citado Centro Cultural de su ciudad. Su muestra es elogiada por la crítica y por personalidades de la Academia Nacional del Tango como Miguel Jubany.
Pero toda historia tiene un final, también la de Alberto Bono
Sería el 16 de Octubre 2010. En el PC veo que el día anteror me había llamado el Flaco desde Rosario, quedó un mensaje sonoro en Skype creo. No lo escuché en el momento por las prisas, vivir en Galapagar, una de esas ciudades dormitorios de Madrid implican eso…volver para dormir. El 20 de Octubre 2010 me llega del Buqui Vatalaro, escritor rosarino que Bono me presentó como a tanta gente más, la mala nueva… he dejado ese mensaje escondido, nunca quise escucharlo
Flaco, te dejo haciendo Silbando con Beto Giraudo, año 2007 en la Casa del Tango de Rosario… lo elegí porque don José González Castillo, un prócer del tango, había nacido en Rosario como tú… era 1925 cuando escribió estos versos, la música la puso Sebastián Piana y dicen que también Cátulo Castillo, el hijo del poeta
EDUARDO ALDISER – MADRID 2010 / PONTEVEDRA 2023