Más de una vez algún amigo español, argentinos de otras provincias o ciudadanos del mundo, me preguntan sobre el Monumento Nacional a la Bandera, que se levanta en Rosario, Provincia de Santa Fe, Argentina
Lo primero que debo explicarle es sobre sus dimensiones. La torre principal que representa el palo mayor de esa nave dispuesta a navegar por el Río Paraná, que está a un centenar de metros, mide 70 metros de altura. Se ha emplazado donde se pudo saber por datos históricos que el 27 de febrero de 1812, el General Belgrano realizó el izado de la bandera frente a uno de sus batallones, allí en las barrancas de esa gran vía fluvial, donde se hallaba la bajada natural desde la pequeña villa, que es la ahora gran ciudad argentina de Rosario hacia la costa.
El monumento y sus muchos emblemas con sentido propio
Entre los elementos que componen este singular monumento, sin dudas el más importante del mundo dedicado a una bandera, digamos que el Propileo Triunfal de la Patria representa a la Nación Argentina, que surge como ente jurídicamente organizado al aplicarse la Constitución de 1853. Tiene reminiscencias del templo a Atenea en la Acrópolis de Atenas. Grecia. Sus muros están embellecidos con versos del Himno Nacional Argentino, en un sentido de unidad de todos los símbolos patrios.
Qué nos espera en el Propileo Triunfal de la Patria
Es un santuario votivo donde se albergan cenizas y exalta al soldado anónimo de la Independencia. En el centro, se halla el pétreo pedestal sobre el que se asienta la urna que contiene restos de los granaderos del General San Martín, muertos durante la batalla en la cercana población de San Lorenzo, con Fuego Sagrado de la Argentinidad que arde permanentemente. Dos galerías, que bordean el amplio templo con salidas a las calles rosarinas de Santa Fe y Córdoba, arterias muy importantes, recogen las hornacinas con esculturas que representan a la Gran Patria Americana en sus cuatro etapas: América Indígena, América Colonial, América Constitucional, América Futura.
El Propileo en la Popa… vamos hacia la Proa
Venimos desde la popa hacia la proa de esta nave pétrea. Desde el templo ateniense bajamos por una larga escalinata. Ese es el Patio Cívico que, con su escalinata, hace revivir el esfuerzo realizado por los patriotas de Argentina para organizar el Estado: batallas, acuerdos, pactos. Esta alegoría sugiere la idea del ascenso lento pero seguro, bordeado de parapetos que impiden desviarse de la línea recta, norma de los próceres argentinos.
La escalinata es en su conjunto y con los muros laterales que la contienen, otra presencia de la cultura helénica, como un moderno teatro griego, ágora a su vez donde converge el pueblo, no para realizar transacciones mercantilistas, sino para honrar a la Patria a través de su bandera. Enfrente, en su punto más estrecho, la cara oeste de la torre central, que se eleva a setenta metros de altura, las miradas convergen en el atrio donde se encuentra la Madre Patria y asciende hasta el Propileo Triunfal de la Patria. En los laterales hay veintidós farolas-mástiles donde flamean otras tantas enseñas.
Homenaje de España representada por su rey, Don Juan Carlos
La imagen nos muestra la conjunción de las banderas de España y Argentina, la anfitriona, durante la visita de los Reyes de España D. Juan Carlos de Borbón y su esposa la Reina Sofía, el 17 de abril de 1985. En esa ocasión el Rey Juan Carlos hizo entrega de la Bandera de Ceremonia de España al Intendente de Rosario. Es la bandera española que actualmente se exhibe en la Galería de Honor de las Banderas del Monumento.
En el Monumento se recibió al Papa Juan Pablo II
De los muchos momentos especiales vividos en el Monumento a la Bandera Argentina, destacamos el encuentro del Papa Juan Pablo II con la cristiandad argentina el 11 de abril de 1987 y la visita del Presidente de Italia, Dr. Carlos Azeglio Ciampi, el 16 de marzo de 2001. En todos los casos grandes multitudes no solo completaron el aforo del Patio Cívico sino también el entorno del Monumento.
EDICIÓN DE EDUARDO ALDISER / 2010 – 2014
En 2018 y con la participación de Enrique Llopis como cicerone, Ediciones de Aquí a la Vuelta realizó este vídeo donde se nos muestra y explica cada uno de los muchos componentes que tiene este monumento distinto, inolvidable