Manuel Belgrano fue enterrado –por su voluntad expresada en su testamento– en la entrada de la Iglesia del Rosario del Convento de Santo Domingo, amortajado con el blanco hábito de la orden los dominicos, ya que pertenecía a la Tercera Orden de Santo Domingo. Cerca de su tumba también estaban enterrados los restos de sus padres y otros personajes como Martín de Álzaga.Artículo subido el 18/03/22